Algunos de los condenados asistimos por primera vez al Japan Expo de Paris, que se celebró del 5 al 8 de julio. Sin duda, un evento al que hay que asistir.
Lo cierto es que tan sólo pudimos asistir dos días, pero fueron dos días de no parar. A continuación, os relatamos nuestra experiencia:
Lo primero que nos llamó la atención fue el hecho de que, según salías del metro, ya había gente de la organización dirigiendo a las grandes masas de gente que iban llegando; indicaban dónde había que dirigirse para comprar las entradas, por dónde tenían que ir los medios de prensa o por dónde los visitantes que ya tenían su entrada. Nosotros nos dirigimos a la puerta por donde entraban los medios de prensa. Nada más entrar, no pudimos evitar poner cara de asombro al ver lo que teníamos ante nuestros ojos: una explanada enorme llena de luces, color, pancartas, muñecos gigantes, stands y mucha, mucha gente.
Nos llevó los dos días el poder visitar todas las exposiciones y cada uno de los stands comerciales, que estaban dispuestos por todo el pabellón divididos en zonas según la temática (moda, comic, manga, etc). Y, por supuesto, el sinfín de editoriales que presentaban sus nuevas obras con pancartas gigantes, muñecos gigantes y otras formas de merchandising. Todo a lo grande.
Por otro lado, hay que destacar otras áreas dignas de visitar como la zona cultural, o la zona en la que estaban situados los stands no comerciales, las asociaciones, los fanzines, etc.
Aparte del evento en sí, el sábado pudimos disfrutar de un desfile de moda en el escenario principal, el cual era enorme, situados en la zona que estaba destinada exclusivamente a la prensa. A continuación, comenzaba el European Cosplay Gathering (ECG), un concurso de cosplay en el que participaban cosplayers de toda Europa; en este caso, nuestra representante individual fue Yurai, que iba disfrazada del World of Warcraft. El domingo presenciamos la selección francesa de este mismo concurso.
Disfrutar de estas exhibiciones en el pabellón donde se situaba el escenario fue una experiencia increible: las luces, el sonido, los presentadores, la organización... Todo era espectacular y tenía que salir perfecto.
Nos hubiera gustado poder asistir a más actos, conferencias, presentaciones y otras muchas cosas que sucedieron en el evento a lo largo de los cuatro días, pero no pudimos por falta de tiempo. Además, ahí no acababa todo, ya que en el pabellón contiguo se disponía todo lo referente al cómic en la llamada Comic Con. Cuando supimos de la existencia de esto nos quisimos morir, no podíamos creernos que aún hubiera más. Eso sí, esta zona no estaba tan recargada de stands o editoriales, por lo que pudimos dar una vuelta a todo el recinto en poco tiempo y contemplar las maquetas y otras construcciones enormes como la famosa puerta interestelar de la película Stargate o figuras a tamaño real de Alien.
Y por todo esto concluimos pues, que el Japan Expo es un evento que merece la pena visitar, que cuenta con un gran equipo de organización y al que sin duda seguiremos asistiendo año tras año.
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